Muerte y resurrección de unos tendones

No hay nada que ponga más nervioso a un runner que la posibilidad de estar lesionado. Esta semana empezó soportando la herencia de la anterior, dolor en los dos tendones de Aquiles

Cuando llevas un tiempo dedicándote a correr larga distancia tienes una lesiones "amigas" que te acompañan cada cierto tiempo. Las conoces y sabes como tratarlas, de forma que sólo sean molestias temporales que sabes que acabarán desapareciendo. En mi caso me pasa esto con las tendinitis de pata de ganso, una molestia puntual por encima del tobillo, los sóleos sobrecargados o algún dolorcillo en la rodilla. Casi todas aparecen durante algún momento de mis planes de entrenamiento para maratón, no me impiden entrenar y soy capaz de controlarlas sin que vayan a más.

Sin embargo, las molestias en el Aquiles nunca las había sufrido y, conociendo historias de otros compañeros, me daba bastante miedo. Así que decidí ir con precaución y, aprovechando que me tocaba viajar a Valencia por trabajo, dedicarme a la elíptica y correr sólo un día laborable para ver si seguía empeorando.

La elíptica me vino genial porque no agravó la molestia, que el domingo y lunes era más bien dolor, por lo que pude dar el descanso necesario al tendón. Durante estos días me he concentrado más en aplicar hielo y antiinflamatorios que en entrenar, o quizás era ese mismo el entrenamiento que necesitaba esta semana.

La salida del miércoles fue penosa por el cansancio de los 45km del sábado anterior, pero el tendón, sin estar bien, aguantó perfectamente los 8km cochineros que le propuse. A final de semana ya no había dolor y simplemente notaba que había algo en la pierna derecha, en estos casos uno nunca sabe si es real o simple obsesión.

Finalmente el viernes me di el alta médica y decidí correr la Sureste XXL Experience 30km. Se puede entender como un riesgo, pero lo cierto es que a esas alturas ya estaba seguro de que me encontraría bien tras el descanso que le había dado a las piernas durante la semana.

Después de la carrera no he tenido ningún problema y, aunque mantendré los cuidados y precauciones, me siento totalmente recuperado.

Kilometraje semanal: 38 km (1550 metros desnivel positivo)

• M:     Elíptica (1 hora) + Pesas + abdominales + lumbares
• X:      8km (5:18/km)+ est.
• S:       Sureste XXL Trail Experience - 30km trail (4:28)
• D:      Elíptica (45 minutos)

Estos próximos siete días volveré a la rutina pero no meteré tanta cuesta entre semana para no estresar los tendones, eso sí, el fin de semana tocará darse una vuelta por la montaña... esta vez sin dorsal.

Antes de despedirme agradecer a todos que me hayan recordado por qué razón tengo un blog, después de todos los consejos útiles que he recibido para afrontar las próximas salidas en montaña y los votos para los Premios 20Blogs (ahora mismo aguanto tercero en la categoría de deportes).

PD: No, no voy a participar en ninguno de los dos 10K del próximo fin de semana. En serio, lo juro.